Según se informó, se trató de un operativo de control vehicular realizado por la Policía de Entre Ríos, donde detuvieron la marcha de un camión Mercedes Benz con semirremolque térmico, que se dirigía de norte a sur. Se trata de un vehículo de cargas de encomiendas varias, que había partido desde Iguazú, provincia de Misiones, con destino a La Tablada, provincia de Buenos Aires.
El perro detector de drogas marcó algo con su olfato y la jueza federal Analía Ramponi autorizó la apertura del camión. Encontraron numerosos bultos que fueron bajados del semirremolque, que no tenía drogas. Tras cotejar la carga con los remitos, constataron anomalías en gran cantidad de neumáticos de diferentes marcas, modelos y rodados empaquetados en más 100 bultos. Las cubiertas estaban ensambladas una dentro de otra y con la inscripción “Made in China”.
Además, se encontraron 10 bultos de gran tamaño con cartones de cigarrillos paraguayos, y se constata un paquete con teléfonos celulares de diferentes marcas y otros elementos. Se observó que parte de la mercadería no se encontraba amparada por remito.
Del recuento provisorio, el camión transportaba en total: 927 cubiertas a granel, nueve bultos con cajas de cigarrillos (unos 40.000 atados en total), 29 celulares, cinco iPads, cuatro video juegos, 15 despertadores digitales y 49 garrafas de líquido refrigerante.
Se dio intervención a la Aduana de Concordia, que se hizo cargo de la mercadería incautada, mientras que el chofer del camión quedó supeditado a la causa.