La medida se toma, según publicó Infobae, “en función de la evolución de las variables que inciden en la formación de los precios de los combustibles”.
Desde la petrolera de mayoría accionaria estatal aseguraron que continuarán realizando sus “mayores esfuerzos productivos y logísticos para sostener el abastecimiento del mercado nacional en un contexto de sostenidos récords históricos de demanda estacional”.
“Luego de este ajuste continuaremos monitoreando la evolución de las variables que inciden en la formación de precios, teniendo siempre en consideración las particularidades del contexto macroeconómico del país y la realidad internacional”, explicaron.
El primero de octubre pasado había sido la última suba de YPF, también un 6% promedio, medida que después siguieron las demás petroleras privadas, como Axion, Raízen (Shell), Puma y otras. Se espera que con la suba de noviembre ocurra lo mismo. Hace un mes se modificaron los valores de los impuestos a los Combustibles Líquidos (ICL) y al Dióxido de Carbono, que se venían postergando desde finales de 2020, y eso activó el último incremento.