El argentino Iair Horn fue puesto en libertad este sábado por el grupo terrorista Hamas, como parte de una nueva entrega de rehenes que incluyó también el rusoisraelí Alexander Trufanov; y Sagui Dekel-Chen, de ascendencia estadounidense.
La ceremonia de liberación organizada por Hamas se celebró en un escenario emplazado en una zona devastada de Gaza, donde se venían carteles con frases como "No habrá migración, salvo a Jerusalén" o "Cruzamos rápidamente" (en referencia al ataque del 7 de octubre en territorio israelí).
Después de que una trabajadora de la Cruz Roja firmara los documentos de liberación de manos de un miliciano de Hamas, los rehenes subieron al escenario, ubicado a pocos metros de la casa de Yahya Sinwar, uno de los líderes del grupo terrorista y cerebro de los ataques del 7 de octubre, que murió en un enfrentamiento con las fuerzas israelíes en octubre de 2024.
Sobre él, los rehenes dieron discursos pidiendo al Gobierno israelí que mantenga la tregua, tras lo que fueron conducidos a los vehículos de la Cruz Roja camino a territorio israelí.
Iair Horn tiene 46 años y se fue a Israel con la crisis del 2000. Su hermano Eitan también fue secuestrado el 7 de octubre de 2023 del kibutz Nir Oz, en Israel, pero él no figura en el listado de rehenes próximos a liberar.
Se espera que Israel libere en las próximas horas a 369 presos palestinos a cambio de los tres rehenes, aunque el Gobierno israelí todavía no se ha pronunciado al respecto.
El grupo islamista dijo en un comunicado que la liberación "confirma que no hay otra manera de poner en libertad (a los rehenes en Gaza) que no sea a través de las negociaciones y (...) el acuerdo de alto el fuego".
Hamas anunció ayer los nombres de los tres rehenes tras amenazar a principios de semana con pausar la liberación por las repetidas "violaciones" israelíes del acuerdo, entre las que citó impedimentos a la entrada de ayuda humanitaria.
Israel, por su parte, amenazó con retomar la guerra en Gaza si Hamás no liberaba hoy a los rehenes, sin aclarar a cuántos, aprovechando un mensaje ambiguo del presidente estadounidense, Donald Trump, que amenazó con un "infierno" en Gaza si Hamás no liberaba a "todos los rehenes" antes del sábado a mediodía.